CONVENCERÍA A QUIENES DUDAN
DE LA EXISTENCIA DE DIOS?
Si actualmente se produjese algún milagro semejante a cuando los israelitas cruzaron a pie el Mar Rojo, o cuando Jesucristo resucitó a Lázaro, ese acontecimiento ocuparía grandes espacios en las páginas de los periódicas y en todos los demás medios de comunicación.
Caminar a pie entre las aguas del mar, o resucitar a un muerto, representan solamente unos pequeños milagros, si se los compara con otros grandes prodigios que realiza Dios continuamente y atraen muy poco nuestra atención:
Se necesita mucho más poder milagroso para crear y mantener funcionando todas las Leyes que rigen el Universo, que para modificar eventualmente una de esas Leyes, para que el pueblo hebreo pudiese escapar de la persecución del Faraón caminando a pie entre las aguas del mar.
El simple hecho de resucitar a un muerto, también representa un milagro muy inferior al de crear continuamente nuevas vidas en este planeta.
No nos impresiona el milagroso ordenamiento que tienen todas las cosas en el Universo, porque lo contemplamos, insensibles, diariamente. Si viésemos, con mucha frecuencia, esos dos pequeños milagros que yo he citado, no les concederíamos ninguna importancia, ni serían noticiables para los medios de comunicación.
No servirían para conmover a los creyentes cristianos, ni para convencer a los ateos de que existe Dios.
Esta reflexión está copiada de mi BLOG
www.malvarelias.blogspot.com
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